En el informe de sostenibilidad 2019, la Industria Licorera de Caldas ratifica, en todo el ciclo de vida del producto, su compromiso con el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Resalta programas y proyectos encaminados a lograr los niveles de excelencia de sostenibilidad y una relación significativa con los grupos de interés en ámbitos culturales, ambientales, económicos y sociales.
COMPROMISO AMBIENTAL
Para la empresa el compromiso ambiental es fundamental tanto en la protección de las materias primas usadas en la elaboración de licores, como en los recursos naturales. “El desarrollo sostenible que se busca en la Industria Licorera de Caldas es vital a nivel local y regional, y cada persona involucrada tiene la responsabilidad de cumplir con los objetivos para una convivencia social, cultural y ambiental sana”, ratifica el informe.
Anuncia que en el año 2019 logró reducir un 37,7% las emisiones de gases de efecto invernadero en la atmósfera, gracias a todos los esfuerzos y el compromiso con la sostenibilidad,
“Además de adoptar mejores prácticas dentro de la empresa para mitigar esta huella, nos hemos encargado de comprar bonos de carbono, para así ayudar a financiar proyectos de energías renovables, convirtiéndonos en una empresa carbono neutro”.
EL FUTURO
La Industria Licorera de Caldas avanza en su propósito trabajar con proveedores y clientes para incrementar los esfuerzos de mitigación. Tiene previsto recibir este año 2020 el Certificado de Energía Renovable Internacional (I-REC), gracias a la colaboración con el proveedor de energía EPM. “Así, nuestras emisiones indirectas de alcance 2 podrán ser mitigadas en gran parte”, recalca el informe.
De otro lado, para medir aún más la huella, adelanta el proceso de cuantificar la cantidad de carbono secuestrada en la reserva natural de 270 hectáreas que posee en el área de influencia de la fábrica. El propósito es calcular la cantidad de carbono que se captura allí y darle un mejor manejo a las emisiones.
Este objetivo tiene otros alcances: investigar la posibilidad de invertir en energías limpias, como la fotovoltáica y la hidroeléctrica, para suministrar el propio consumo de energía, y si es posible, introducirla al sistema interconectado nacional, y comercializarla.
LA RUTA DEL RON
La Industria Licorera de Caldas trabaja en varios puntos estratégicos de su sendero situado en inmediaciones de la fábrica. Por un lado ofrece charlas educativas sobre los secretos de la reserva natural de 270 hectáreas dedicada al cuidado de dos de las principales materias primas usadas en la producción de la empresa. La primera el agua manantial de extrema pureza encontrada en lo más alto de las montañas, donde afloran 68 manantiales de agua pura conformando 3 quebradas denominadas: Pinera, Cristalina y Guayabal; la segunda, el Roble Blanco Colombiano, con 24 hectáreas distribuidas en 18 lotes con un total de 18.356 árboles sembrados, del cual se obtienen la madera para la elaboración de los toneles para el añejamiento del Ron Viejo de Caldas.
A esta política de preservación del medio ambiente, la empresa ha incorporado también una planta de compostaje en donde se da un manejo a todos los residuos orgánicos con el fin de transformarlos en materiales biodegradables.
En resumen, se busca con estas decisiones fomentar un ecoturismo responsable por medio de un Sendero Ecológico en medio de la Reserva Natural, con un alto componente educativo que tiene el objetivo de conocer, conservar y perpetuar el patrimonio natural y cultural de la ILC, demostrando el compromiso que se tiene con el medio ambiente y la sostenibilidad.
RON Y FÚTBOL EN PAZ
La Industria Licorera de Caldas ratifica en su informe de sostenibilidad, el compromiso social dirigido a sensibilizar a los hinchas pertenecientes a las barras bravas de los equipos de fútbol que patrocina, para hacer una concientización cultural en lo que se refiere a que el fútbol se debe disfrutar en paz y alegría, evitando los conflictos al interior y en el exterior de las canchas y así generar un espacio de sana convivencia para la familia.
El programa consiste en la recolección de residuos de tetra pack, por medio de las diferentes barras de fútbol, a puntos de recolección de la ILC con el fin de reciclar el material de cartón y obsequiar entradas a los partidos del equipo patrocinado.