Caldas, el hermoso departamento colombiano conocido por su diversidad natural y paisajes pintorescos, es un destino de para los amantes de la vida silvestre. Entre sus tesoros alados, los colibríes ocupan un lugar especial. Con 75 de las 165 especies de colibríes registradas en Colombia (150 de las 350 registradas en el mundo) , este rincón del país se ha convertido en un paraíso para los observadores de aves y amantes de la naturaleza. Los colibríes, que hacen parte de una familia de aves llamada Trochilinae propios del continente americano.
Refugios para la contemplación
En Caldas, es posible deleitarse con la majestuosidad de estas pequeñas criaturas en diversos lugares, tanto en entornos urbanos como rurales. Uno de los mejores lugares para avistarlos es el Recinto del Pensamiento, un oasis de biodiversidad en Manizales. Aquí, los colibríes encuentran libaderos o cebaderos especialmente diseñados para su observación, brindando a los visitantes la oportunidad de maravillarse con su aleteo perpetuo, sus deslumbrantes colores y su destreza para extraer néctar de las flores.
La Reserva natural Río Blanco es un paraíso para los amantes de las aves, especialmente los colibríes. Aquí, los visitantes pueden disfrutar de la maravillosa experiencia de observar numerosas especies de colibríes en su hábitat natural. Los vibrantes colores y los zumbidos de estas diminutas criaturas añaden un toque de magia a la belleza natural de Río Blanco
Otro destino imperdible para los amantes de los colibríes es Timanú, un lugar donde la naturaleza se muestra en todo su esplendor. En este entorno mágico, los colibríes se entrelazan con el entorno, creando una sinfonía de vida y color. Además, el Hotel Termales del Ruíz, ubicado en pleno corazón de la naturaleza, ofrece a sus huéspedes la oportunidad de disfrutar de la presencia de estas aves en un ambiente relajante y acogedor.
Colibríes únicos
Uno de los tesoros más raros de la región es el Colibrí Barbudito o Chivito de Páramo (Oxypogon stubelii), una especie que solo puede encontrarse en los páramos del Parque Nacional Natural Los Nevados. Estos páramos, con su biodiversidad única y paisajes impresionantes, son el hogar de esta pequeña joya alada que fascina a quienes tienen la suerte de contemplarla.
Secretos asombrosos de los colibríes
Siendo las aves más pequeñas del mundo, los colibríes son objeto de estudio constante por parte de los investigadores. Estas criaturas aladas varían en tamaño, desde unos asombrosos 2,2 gramos hasta unos aún impresionantes 20 gramos, dependiendo de la especie. Su característica más distintiva es el rápido movimiento de sus alas, que emiten un zumbido característico mientras vuelan.
Una hazaña única en el reino de las aves es la capacidad de los colibríes para volar en todas las direcciones, incluso al revés y boca abajo. Esto les permite acceder a las flores desde cualquier ángulo, asegurando su acceso al néctar vital.
Los rituales de apareamiento de los colibríes son igualmente fascinantes. El cortejo buceo, como se le conoce, implica que los machos se eleven hasta al menos 60 pies en el aire, realicen un rápido descenso, hagan una vuelta en U y repitan el proceso hasta captar la atención de una hembra con la que puedan aparearse.
En cuanto a su dieta, los colibríes son omnívoros. Si bien su principal fuente de alimento es el néctar y la savia de las flores, también consumen polen y pequeños insectos para obtener proteínas. Sorprendentemente, estas aves pueden ingerir hasta tres veces su propio peso en comida cada día, un testimonio de su voracidad.
Los colibríes desempeñan un papel fundamental en la polinización de las flores, ayudando a mantener el equilibrio de los ecosistemas. Mientras se alimentan, el polen se adhiere a sus plumas y se transfiere de flor en flor, facilitando la reproducción de muchas especies vegetales; sus picos, tamaño y curvatura, dependen del tipo de flor de acuerdo con la evolución vegetal
Además de su asombroso vuelo y sus hábitos de alimentación, los colibríes también son notables por su inteligencia. Sorprendentemente, estos diminutos seres alados tienen el cerebro más grande en proporción a su tamaño corporal en el mundo de las aves, lo que les otorga habilidades cognitivas sorprendentes.
El plumaje, en la mayoría de los colibríes, presenta una característica especial y es la iridiscencia, en la que se refleja en ellos los rayos del sol para dar visos llamativos
En Caldas, la magia de los colibríes espera ser descubierta por aquellos que buscan una conexión profunda con la naturaleza. Ya sea en los páramos de Los Nevados o en los jardines del Recinto del Pensamiento, estos pequeños embajadores de la vida silvestre ofrecen una experiencia inolvidable que cautiva a visitantes de todas las edades.