La Industria Licorera de Caldas (ILC) logró reducir drásticamente su huella hídrica en la producción de sus licores. En el transcurso del 2020 alcanzó una reducción del 58% en los litros de agua consumidos por litros de licor producidos.
La Licorera se ha comprometido con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas a través de proyectos de eficiencia energética, conciencia ambiental y cuidado de las fuentes hídricas en sus procesos de producción.
Esto le ha permitido posicionarse como la primera empresa del país que logra conectar las aguas residuales domésticas al interceptor de aguas de la ciudad con el objetivo de sanear la quebrada Manizales en materia del tratamiento y vertimiento de estas aguas.
Entre sus acciones para cumplir el ODS 6 de Agua Limpia y Saneamiento, la empresa ha llevado un trabajo de cuidado del agua, los bosques, las montañas, los humedales, ríos y acuíferos. Desde hace varios años ha liderado acciones de mantenimiento y protección de más de 270 hectáreas naturales y llenas de vida, y de 68 fuentes de agua que nutren la riqueza hídrica de la capital caldense.
Por otro lado, la ILC cuenta con una planta de tratamiento de agua potable en la que el agua de la reserva es tratada para el desarrollo de las actividades industriales y domésticas de la empresa. Todas estas acciones garantizan que su proceso de producción de licores es ambiental, social y económicamente sostenible, debido a que no afecta la prestación de bienes y servicios a la comunidad ni interfiere con el equilibrio ecológico del ecosistema.